Llegamos a Paracas después de 4 horas de autobús a través de una carretera que no está del todo mal. Los autobuses no son muy incómodos, sólo que más estrechos.
No es directo y realizamos paradas en Cañete, Chincha y El Carmen. En cada parada sube un revisor para comprobar los nuevos ocupantes del autobús y tienes que enseñar el boleto constantemente. A cada momento se suben personas que venden refrescos y comida.
Llegamos a la ciudad después de tomar un taxi en Pisco y nos recibe Chachi, un amigo del couchsurfing de Jose, que tiene la bondad de alojarnos.
Paracas es mundialmente conocido por la Reserva Nacional de Paracas y por la Isla Ballesta, donde hay una concentración espectacular de todo tipo de aves, pingüinos, focas y lobos marinos. Es un lugar muy turístico y se nota nada más llegar, los precios son más elevados y no paras de ver turistas.
A la mañana siguiente nos dirigimos a la Isla en una lancha. Antes de llegar vislumbras “El Candelabro”: inscripción en la arena similares a las líneas de Nazca. No se sabe bien quién las realizó, si antepasados en honor a su dios o los mismos extraterrestres. Todo sigue rodeado de mucha leyenda. Nos vamos acercando a la isla y empezamos a divisar numerosas aves que llegan perfectamente alineadas, no he visto tantas en mi vida. Vemos a pelicanos, lobos marinos, focas y pingüinos.
Nos sentimos unos turistas más con la excursión organizada, pero es lo que somos, jajajaja.
15 dic 2009
Paracas
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Nenes, estoy con vosotros, os sigo y os deseo intensidad, suerte y salud en vuestro increible periplo.
ResponderEliminarGalindo
ke bien,ya en el caminoo..estoy escuchando ahorita vuestra entrevista con Cochecho,muy interesante...
ResponderEliminartioooss habeis estado en Paracas,habeis visto el candelabro!!!!k grandess!!
seguid informando.os seguiré escuchando
mil abrazos pa los dos!!